En 1626 se demolió la primera Catedral de México.
En la sacristía de la actual Catedral, se colocó el altar mayor para las celebraciones y los oficios, hasta el año 1641.
La sacristía es el espacio más antiguo de la Catedral de la Ciudad de México. En su interior se pueden admirar hermosas obras de arte de pintores novohispanos: “El Triunfo De La Iglesia”, “La aparición de San Miguel”, La Mujer del Apocalipsis, “El Tránsito De La Virgen y “La Entrada De Cristo A Jerusalén”
Se observan ornamentos y orfebrería en los inventarios de los años: 1632, 1649, 1654 y 1669.
Los muebles que hoy alberga son del Siglo XVIII, los armarios y cajoneras en madera de bálsamo. Las sillas y credenza con patas de cabriola y garra, además de relieves fitomorfos.
El armario para cálices, originalmente ubicado en el muro poniente bajo la Virgen del Apocalipsis de Cristóbal de Villalpando, albergaba gran número de cálices y vasos sagrados de oro decorados con piedras preciosas. Custodias de oro, candeleros, pedestales de plata.
En 1957 se cambió el piso y la tarima. Se colocó una reja gemela a la de la Sala Capitular creándose una antesacristía.
El lienzo de la Virgen de Guadalupe, obra de Francisco Martínez realizada en 1747 que permaneció largo tiempo en el sótano, ahora preside la Sala Guadalupana del antiguo edificio de la Curia de la Virgen de Guadalupe.
La sacristía de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, un Tesoro para los visitantes.
Fuentes: P. José de Jesús Aguilar Valdés. Curso del Profesor Ramón Rodríguez Muñoz Ledo. Visita Guiada.